La actividad económica creció 3,9% en el tercer trimestre del año en comparación con el trimestre anterior, aunque todavía registra una caída interanual, de 2,1 por ciento, según informó este lunes el Indec. En el acumulado del año, en tanto, el retroceso en relación con el 2023 es de -3%, en línea con la profundidad de la recesión esperada para el 2024 por el mercado.
De esta forma, el Producto Bruto Interno volvió a exhibir un trimestre de crecimiento desestacionalizado luego de tres consecutivos de retroceso. El último de 2023 había resultado en una contracción de 1,9%, el primero de 2024, de 2,1% y el segundo de este año, de 1,7 por ciento.
“En cuanto a la demanda, todos los componentes tuvieron un incremento trimestral; en términos desestacionalizados, las Exportaciones crecieron 3,2%; el Consumo privado aumentó 4,6%; el Consumo público, 0,7%; y la Formación bruta de capital fijo creció 12,0%”, especificó.
“En términos desestacionalizados, sólo 0,1% por debajo del nivel del cuarto trimestre de 2023. La suba trimestral fue mayor a la estimada previamente por el EMAE”, mencionó el asesor del Ministerio de Economía y director del BICE Martín Vauthier.
Sobre la caída interanual, el Indec especificó que “entre los componentes de la demanda, la mayor disminución se registró en la Formación bruta de capital fijo, con -16,8% interanual. De los sectores de actividad, se destacaron los descensos en Construcción (-14,9%), Pesca (-6,7%) y las actividades de Comercio mayorista, minorista y reparaciones (-6,1 por ciento). A su vez, creció el sector de Agricultura, ganadería, caza y silvicultura (13,2%)”, continuó el organismo estadístico.
Un número relevante para la economía que viene tiene que ver con las inversiones, que en términos interanuales mostraron fuertes caídas (16,8%) pero una mejora trimestral. “Este descenso se explica por la caída de 20,6% de la inversión en construcciones, el descenso de 7,2% de otras construcciones, la disminución de 20,2% en maquinaria y equipo y la caída de 0,6% en equipo de transporte. Dentro de maquinaria y equipo, el componente nacional descendió un 13,2% y el componente importado cayó un 24,7%. En equipo de transporte el componente nacional descendió 5,2% y el importado tuvo un aumento de 20,9%”, detalló el Indec. Pero la foto más reciente muestra que la inversión creció 12% en relación al trimestre anterior.
El Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central marcó que, mientras hace un mes las consultoras y fondos de inversión participantes de ese sondeo esperaban un desplome de 3,6% del Producto Bruto este año y un avance en la misma proporción para el 2025, ahora la expectativa pasó a ser de un retroceso de 3% en 2024 y una mejora de 4,2%. Esa cifra está aún por debajo del 5% que el Gobierno arriesga como seguro, aunque se espera un valor ligeramente mayor.
Una de las claves para determinarlo será el “arrastre”, que es en la jerga estadística un elemento considerado para entender que la velocidad a la que termina moviéndose la actividad económica en la parte final del año asegura un “mínimo” de crecimiento para el ejercicio siguiente. Para algunas consultora ese “piso” es de 2% aunque en los despachos oficiales creen que podría ser mayor.