Las provincias sufrieron durante enero una caída de $277.000 millones en ingresos por coparticipación, en medio del debate por la ley ómnibus y el reclamo de los gobernadores por un mecanismo de compensación ante la pérdida de recaudación.
Los datos surgen de un informe del Iaraf (Instituto Argentino de Análisis Fiscal) en base a datos del Indec y de la Dnap (Dirección Nacional de Asuntos Provinciales). Allí se consignó para el mes pasado una baja de 12,2% en términos reales respecto al año previo en las transferencias automáticas por coparticipación, leyes complementarias y compensaciones.
“Las jurisdicciones más afectadas serían Buenos Aires (-14,6%), Salta (-12,4%) y Misiones (-12,2%). Por otro lado, las jurisdicciones con menor caída serían CABA (-9,7%), La Pampa (-10,9%) y San Luis (-11%)”, detalló el Iaraf.
Uno de los mayores impactos que sufrieron las provincias fue la última reforma del impuesto a las Ganancias, vigente desde septiembre del año pasado. De hecho, en 2023 las transferencias automáticas finalizaron con una caída del 14% en términos reales y cortaron con dos años consecutivos de crecimiento.
Los mandatarios propusieron este lunes al ministro del Interior, Guillermo Francos, que se coparticipe el Impuesto PAIS que pesa sobre el pago de importaciones en toda la economía. El tributo fue el de mayor crecimiento en 2023 a partir de la extensión que aplicó el Gobierno anterior, antes de la suba al 17,5% de La Libertad Avanza, y generó ingresos por $1,5 billones solo el año pasado.
De la masa de fondos recaudados, la Nación retiene el 70%, mediante la ANSES, y el 30% restante se distribuye a obras y desarrollos en las provincias. Sin embargo, ese porcentaje se ejecuta a través del ReNaBap (Registro Nacional de Barrios Populares). Los gobernadores le plantearon a Francos que pretenden tomar el control de ese 30%, sin alterar el destino para obras sociales de esos fondos. Sin embargo, el Gobierno descartó en las últimas horas avanzar en ese sentido.
Por otro lado, al igual que con el capítulo fiscal de la Ley Ómnibus, el oficialismo también retiró su proyecto de ley de impuesto a los ingresos personales que revertía la última reforma de Ganancias y gravaba, con escalas más benignas que en el esquema anterior, los salarios desde $1.350.000 brutos mensuales. Los gobernadores no estaban dispuestos a pagar el costo político de esa medida e incluso habían manifestado, sin éxito, el pedido por coparticipar el impuesto al cheque.
Para el Gobierno asegurarse de sumar recaudación es clave para el objetivo de equilibrio fiscal que tiene el ministro de Economía, Luis Caputo, para 2024. De todos modos, avisaron que el ajuste sobre las provincias será mayor al esperado de no prosperar las negociaciones en el Congreso.