Un adolescente de 17 años recibió un disparo en la madrugada de hoy lunes a la salida de una discoteca en el barrio porteño de Palermo.
Tras la agresión, personal del SAME lo trasladó al hospital Fernández. La Policía de la Ciudad, a cargo de esclarecer el hecho, montó un operativo cerrojo para detener a los agresores, que escaparon del lugar en un Toyota Etios color blanco. Fuentes policiales confirmaron que el joven llevaba varias bolsas de cocaína y tusi entre sus ropas.
El hecho ocurrió cerca de las 7 de la mañana en la puerta de la disco Input, situada en avenida Juan Bautista Justo al 1600, y en el marco de la fiesta “La Fresa”, el evento que el boliche suele albergar todos los domingos. El tiroteo fue alertado al 911 por un testigo. Así, personal de la Comisaría 14A se dirigió al lugar y encontró a la víctima tendida en la calle y rodeada de jóvenes que gritaban desesperados para pedir auxilio.
De acuerdo a los primeros testimonios del caso, el ataque ocurrió a la salida del boliche: dos hampones armados le dispararon a la salida del local bailable y luego escaparon.
Poco después, tras el traslado de la víctima en ambulancia al hospital Fernández, comenzó un relevo de cámaras de seguridad que llevó a identificar al Toyota Etios: fue encontrado a mediados de la mañana de hoy en un playón en la calle Iriarte al 3900, dentro de la villa Zavaleta.
Al realizar la consulta correspondiente, este medio verificó que el vehículo acarrea dos multas de tránsito en la provincia de Buenos Aires, ambas por no respetar los límites reglamentarios de velocidad previstos y con un valor de $76.750 cada una.
Por lo pronto, se desconoce el motivo del ataque. La Policía de la Ciudad sospecha de un problema vinculado a las bolsas de droga que el joven baleado, identificado como T.C., llevaba entre sus ropas.
En el hospital Fernández, los médicos determinaron que el joven recibió un solo disparo que le rozó el cuero cabelludo. Llegó lúcido al lugar y se le practicó una tomografía. Se encuentra internado en condición estable, según precisaron desde el Ministerio de Salud porteño a este medio.
Alberto Crescenti, titular del SAME, destacó en declaraciones a la prensa que la víctima “nació de nuevo”, debido a que la bala “no ingresó en el cráneo”.
“Es un chico de 17 años. Por suerte la tomografía computada arroja que el impacto le hizo un sedal. La bala no ingresó en la cabeza, pero le hizo una excoriación en la piel. Realmente nació de nuevo”, sostuvo el doctor Crescenti en diálogo con A24.
En la investigación interviene la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N° 40, a cargo de la doctora María Eugenia Sagasta, Secretaría de la doctora María Gabriela Androvetto.
Los episodios de violencia a la salida de los boliches se repitieron en los últimos años en el barrio de Palermo. Sin ir más lejos, durante la madrugada del 1° de enero de 2023, en pleno festejo de Año Nuevo, un joven de nacionalidad venezolana fue asesinado de un disparo por la espalda en el boliche Rumbas VE, ubicado sobre la calle Gorriti al 5568.
Cerca de las 4 de la mañana, el joven salió del boliche y cuando se disponía para volver a entrar fue atacado por la espalda y cayó malherido de al menos un balazo. Cuando arribó la ambulancia del SAME, los médicos no pudieron hacer nada para reanimarlo y confirmaron su fallecimiento en el lugar. La víctima fatal fue identificada como Brayan Trejo Reyes, de 33 años.
Tres días después, la División Homicidios de la Policía de la Ciudad arrestó a un hombre sospechado por el crimen de Reyes en la esquina de Chubut y Mitre, en Bernal Oeste, según confirmaron fuentes del caso. El nombre del acusado es Darling Javier Ponancio Agüero, de nacionalidad dominicana.