El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se reunió este mediodía con los presidentes de los bloques “dialoguistas” del Senado en busca de un acuerdo que le permita al Gobierno obtener mañana dictamen en el plenario de comisiones que analiza la Ley Bases y el paquete fiscal.
La vicepresidenta y titular del Senado, Victoria Villarruel, también participó de las negociaciones junto al secretario ejecutivo de la Jefatura de Gabinete, José Rolandi; la secretaria de Planeamiento Estratégico Normativo, María Ibarzabal Murphy; el presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala; los senadores Ezequiel Atauche, Juan Carlos Romero, Carlos Arce, Carlos Espínola, Luis Juez y Eduardo Vischi; y el secretario parlamentario Agustín Giustiniani.
El ahora jefe de los ministros primero mantuvo una reunión a solas con la Vicepresidenta y luego fueron llamando a los presidentes de los bloques dialoguistas. El encuentro entre Villarruel, Francos y los presidentes de los distintos espacios duró alrededor de dos horas. Luego Francos se retiró con rumbo a su nuevo despacho en Balcarce 50.
A la salida del encuentro, Francos le respondió consultas a los periodistas apostados en la puerta del Senado y, ante la pregunta sobre si estimaba que mañana se iba a conseguir dictamen para Ley Bases, el funcionario dijo que “hay un dictamen de comisión que se va a circular, en el que hay acuerdos aparentemente suficientes como para aprobarlo”. Pero a esa afirmación siguió otra frase que parece más cercana a la realidad del debate en la Cámara Alta: comentó que “los senadores resolverán si lo circulan mañana para su tratamiento”.
“Venimos teniendo reuniones, hubo encuentros en las que se han tomado muchos puntos que plantearon los senadores, muchos puntos que fueron planteados también por las distintas entidades que vinieron al Senado durante todo este mes. Y me parece que hemos llegado a una posición ya avanzado el periodo de tratamiento, con bastante consenso como para emitir dictamen”, agregó.
Respecto de las modificaciones que se introducirán en el proyecto, el jefe de Gabinete señaló que “nunca es posible encontrar coincidencias totales” y que a partir de esto el Gobierno “acepta hasta donde le parece que pueda aceptar”.
En este punto se refirió a la situación de Aerolíneas Argentinas y el Correo. Los senadores patagónicos, que representan el 25% de la Cámara, se oponen a su privatización pero para el Gobierno esto esta afuera de lo que puede aceptar y avanzará con las privatizaciones. “Así está previsto en el dictamen, habrá que ver si los senadores en las negociaciones finales lo acuerdan o no”, dijo el funcionario.
Francos era una de las voces más importantes de parte de la Casa Rosada a la hora de negociar, pero su enfoque estaba más en las provincias con los gobernadores que en el Senado. Ahora, con una rol más abarcativo, la pregunta era si iba a delegar en Lisandro Catalán, el número 2 de Interior. “Francos va a seguir concentrando las negociaciones, él está al frente”, explicaron desde su entorno.
Por último, y frente a la posición más dura que muestran algunos sectores de la Casa Rosada que se niegan a seguir negociando y proponen hacer caer la ley, Francos buscó quitarle dramatismo y aseguró frente a la consulta de lo que puede suceder si mañana no hay dictamen “seguiremos esperando que lo haya”.
La reunión continuó. Por la Casa Rosada quedaron Rolandi e Ibarzabal. Por ahora, aunque el oficialismo empuja la idea de un dictamen pronto, en los pasillos del Congreso ponen en duda de que esto pueda suceder.